8 DE MARZO. DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER

El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, también podría definirse como el día internacional de la lucha por la Igualdad. Igualdad que comienza en ti, en mí, en todas y cada una de las personas que forman parte de nuestro centro, de nuestra sociedad, de nuestros pueblos. Es una jornada de reivindicación, de lucha contra la desigualdad por razón de género, de denuncia frente a las discriminaciones y las violencias que todavía sufren más de la mitad de la población mundial; es un día para exigir los derechos de las mujeres, como lo que son, derechos humanos universales e irrenunciables.
Como cada 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, en el CPR Tresfuentes renovamos nuestro compromiso con la construcción de un futuro más justo e igualitario. En ese día recordamos los éxitos alcanzados por numerosas mujeres que han luchado y que luchan para conseguir sus derechos. Han sido muchos los logros conseguidos que hacen parecer que las desigualdades entre mujeres y hombres ya no existen. Entre ellos, el acceso a la educación, gratuita y obligatoria; la normativa en materia coeducativa; el éxito académico de las mujeres; su incorporación al mercado laboral y a puestos de responsabilidad; y la igualdad en la capacidad jurídica de obrar. Pero hoy, en pleno siglo XXI, y después de más de doscientos años de reivindicaciones feministas, cuesta creer que haya quienes nieguen una realidad evidente, porque existen motivos reales por los que seguir reclamando la igualdad:

  • Cuando no se ven las desigualdades que, a pesar de los avances, siguen existiendo.
  • Cuando no se reconoce la existencia y el mérito de muchas mujeres que han contribuido al avance de la sociedad a lo largo de los siglos de historia.
  • Cuando no se valoran las aportaciones y conquistas de las mujeres de los movimientos feministas como impulsoras de los derechos de las mujeres.
  • Cuando la segregación laboral mantiene a las mujeres en los trabajos peor remunerados y les dificulta el desarrollo de su carrera profesional.
  • Cuando las tareas en el hogar que realizan los varones son consideradas como “ayudas”, no como una responsabilidad necesariamente compartida.
  • Cuando existen expresiones machistas dirigidas a las mujeres en diferentes contextos y situaciones, expresiones que son irrespetuosas e invasivas y que atentan contra su dignidad.
  • Cuando se cree que las mujeres y los hombres participan por igual en las esferas de poder, ya sean de naturaleza económica, política, cultural, social o deportiva.
  • Cuando parte de la sociedad no es consciente del papel de las mujeres en el desarrollo y el progreso, que, con sus trabajos, también sostienen el mundo.
  • Cuando las mujeres siguen sufriendo violencia machista, estructural y simbólica, que en los casos más graves acaba con sus vidas, y la de sus hijas e hijos.
  • Cuando no se ha interiorizado que la Igualdad ha de ser construida por cada uno y cada una, de forma individual y conjunta.
  • Las niñas y niños, maestras y maestros de Alájar, Linares y Santa Ana recordamos que la Igualdad también comienza en ti y nos comprometemos a luchar día a día para conseguir la igualdad efectiva entre mujeres y hombres.